La lucha entre los departamentos de ventas y el de marketing siempre estará activa ya que “ventas siempre dirá que los contactos que genera marketing no son suficientemente buenos y marketing dirá que ventas no ha sabido cerrarlos correctamente”. La conclusión es que es necesario conectar ambos departamentos bajo una estrategia en la que situemos a las personas en el centro.

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Lo primero que debes preguntarte para dirigirte a un comprador es cómo te puedes dirigir a él. Con el contenido que el cliente te facilita a través de una pequeña encuesta que pondrás en tu página, sabrás su nombre, qué canal prefiere para que contactar con él y qué nivel de interlocución tiene, ya que, no es lo mismo que el interés por un producto cerámico lo tenga un constructor, un arquitecto o un usuario final.

Todo este tipo de información va a ser importante para saber cuándo y cómo impactarle con contenido. Luego, hay una serie de preguntas que debes hacerle ya que el SEO tan solo es un medio para conseguir impactar en la cuenta de resultados. Por ello es importante saber qué busca el cliente de una empresa, conocer cómo se mueve ese cliente en Internet, si interactúa con otros competidores y cómo influye internet en su decisión de compra.

También es importante saber si el cliente considera como una opción comprar el producto por internet o acudir al lugar físicamente. Si es así, el cierre de esa compra habrá que organizarla con una visita o una llamada porque no todos pueden vender hoy por internet ya que la gente, en ocasiones, necesita saber quién está detrás, sobre todo, cuando se trata de acuerdos de grandes dimensiones.

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