Los programas electorales de la oposición presentan algunos puntos coincidentes: apoyo al cooperativismo; fomento de la ecoagricultura; una nueva política turística más sostenible; modernización de los sectores industriales tradicionales; apoyo empresarial a través del Ivace; potenciación de la I+D con unas relaciones universidad-empresa más estrechas; retención y recuperación del talento; creación de un marco laboral estable con especial atención a los jóvenes, los parados de larga duración y los colectivos desfavorecidos. Todos los partidos consultados coinciden en una cosa: la necesidad de un nuevo marco que defina la financiación autonómica, si bien difieren sobre cómo debe ser ese marco: desde un ajuste de la contribución del Estado (PPCV) hasta la aplicación de conciertos económicos como los que rigen en los territorios forales.

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La política fiscal también define el espectro ideológico de los programas: desde las reducciones impositivas propugnadas por el PP o UPyD, hasta el catálogo de impuestos sobre distintos hechos imponibles que enumera Podemos.

Otro de los puntos en los que hay coincidencia es en el apoyo al emprendimiento, las pymes y los trabajadores autónomos como fuentes de creación de empleo y riqueza.