Juan Manuel Baixauli, presidente del Club de las Primeras Marcas de la Comunidad Valenciana

Juan Manuel Baixauli, presidente del Club de las Primeras
Marcas de la Comunidad Valenciana

«El mundo del marketing tiene que estar cerca de las marcas y de las empresas”, explica Juan Manuel Baixauli, presidente del Club de las Primeras Marcas de la Comunidad Valenciana, que este mes de marzo ha cumplido su primer año de vida.

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La idea de la puesta en marcha del Club, que fue impulsada por Javier Gandía, de Bodegas Vicente Gandía; Manuel García Álvarez, de Consum; Álex Salvador, de Cárnicas Serrano y su actual presidente, Juan Manuel Baixauli, comenzó a fraguarse en 2014, año en que “celebramos reuniones con responsables de empresas con el fin de explicarles en qué consistiría el Club de las Primeras Marcas hasta que en marzo de 2015 consideramos que era un buen momento para poner en marcha esta iniciativa de carácter privado en la que ya estaban integradas ocho marcas”, analiza Juan Manuel Baixauli.

Pero, ¿cuál es el fin del Club? “Proyectar a la sociedad que hay marcas y empresas que lo hacen bien en la Comunidad Valenciana, que hay que empezar a creérselo y a comunicarlo y que juntos podemos hacer muchas más acciones. Es más, queremos impregnar a los demás de ese espíritu por cuidar la marca, por impulsarla y por convertirla en un elemento diferencial, unas cualidades que queremos contagiárselas a los demás”, subraya Baixauli.

En concreto, –razona– “somos un bebé con un año de vida que tiene que recorrer un camino y en ese trayecto queremos convertinos en un club que pueda ser un interlocutor válido con otras iniciativas similares, incluso con la Administración ya que esta se ha mostrado muy interesada en lo que hacemos debido a la importancia que tiene la marca a la hora de internacionalizarse. De hecho, ya hemos mantenido reuniones con el Ivace y lo haremos en breve con la Dirección General de Comercio y Consumo”.

El I Encuentro de Marcas Valencianas, que tuvo lugar el pasado 26 de febrero en el Espai Rambleta fue un buen ejemplo de éxito para comenzar a caminar. “Conseguimos convocar en nuestro primer acto público a cerca de 700 personas entre profesionales y estudiantes un viernes por la mañana. Esto es fruto de la unión de un grupo de marcas que nos hemos propuesto contar a la sociedad lo que hacemos y lo que hacemos bien para que otras marcas se vayan sumando al proyecto y, que incluso, podamos establecer sinergias entre todos”, matiza su impulsor.

De hecho y después de un año de la puesta en marcha del Club, a día de hoy ya se han integrado 14 marcas y están en conversaciones con otras 20 o 30 que están pensándose su incorporación. “Se trata de un proceso lento que hay que verlo con una perspectiva a medio y largo plazo. Hay que tener en cuenta que se nos tilda muchas veces a los valencianos de personas que vamos a nuestro aire y este es un ejemplo de que si nos lo proponemos, juntos podemos hacer muchas más cosas”, recalca Baixauli que se define como una persona capaz de liderar, provocar, desencadenar, impulsar y aglutinar esfuerzos y que no pretende perpetuarse en el puesto “todo lo contrario”, racalca.

A pesar de todo, incide Baixauli, “empresas como Cárnicas Serrano, que fue uno de los impulsores del Club, Chocolates Valor o Grefusa están pensándose su incorporación ya que son marcas renombradas en el ámbito nacional y creen que les puede causar problemas posicionarse tan locales al salir al exterior” Sin embargo, Baixauli se muestra optimista y considera que “las marcas que han dudado acabarán entrando en cuanto se lo planteen en serio”.

Cualidades diferenciadoras

“Las marcas que se unan al Club tienen que ser reconocidas en su ámbito de actuación o por su sector o por el gran consumo”, especifica Baixauli.

En cuanto al proceso de entrada al Club, cuando una marca solicita su ingreso, tiene que ser aceptada por el 80 % de los miembros. “No hay más norma que la mayoría de los miembros del Club sintamos que esa marca aporta y enriquece”, precisa.

No existe un protocolo establecido sobre número de trabajadores, facturación, mercados… “ya que hablamos de marcas y no de empresas y de personas. De hecho, cuando una marca no es de gran consumo, le pedimos que argumente su posición en el sector como marca y a partir de ahí nosotros evaluamos”, determina.

La marca/empresa tiene que tener su sede social y operar en la Comunidad Valenciana, estar constituida por capital valenciano y contar con un departamento de Marketing. A este respecto, razona Baixauli, “a veces tenemos dudas, porque en la Comunitat hay marcas muy importantes pero gran parte de su capital es extranjero aunque consideramos que deberían formar parte del Club como el Valencia Club de Fútbol, ya que se trata de una marca valenciana aunque gran parte de su capital no sea valenciano”.

El Club de la Primeras Marcas de la Comunidad Valenciana es autosuficiente, “funciona con sus propios recursos gracias a los 2.000 euros anuales en cuotas que pagan sus socios, no tiene ningún componente político y tampoco depende de la Administración pública“.

Planes a corto plazo

Para 2016, los integrantes del Club se han propuesto comunicar lo que hacen, “salir de ese individualismo que nos caracteriza a los empresarios valencianos y unirnos para hacer cosas y trasladar a la sociedad valenciana que hay marcas que lo están haciendo bien, que son importantes y que tienen prestigio en el exterior. Es decir, que nos creamos que tenemos cosas buenas en la Comunidad Valenciana en un momento en el que nuestra imagen en el exterior está en entredicho”, enfatiza Baixauli.

Para la consecución de todos estos objetivos están planteándose llevar a cabo acciones de comunicación y coger las riendas de alguna actividad que les parezca importante para la proyección del Club en el exterior. Es decir, “liderar activos valencianos que ayuden a transmitir una buena imagen y, medien, a su vez, a que la Comunidad Valenciana transmita una buena imagen con su actividad”.

Además, el Club debe seguir creciendo con la incorporación de nuevas marcas para que vaya cogiendo “más peso y más potencia”, matiza. Una labor que llevan a cabo cada uno de los socios de manera individual, aunque “ya empiezan a haber algunas marcas que nos lo piden”. 

Con lo cual, insiste Baixauli, “nuestra prioridad ahora es seleccionar y conseguir más incorporaciones. Nos gustaría que este año se unieran seis marcas más para acabar el año con 20 socios”.

Vinculación con el Club de Marketing Mediterráneo

El Club de Marketing Mediterráneo reúne a los profesionales del marketing y la comunicación de la Comunidad Valenciana. Por ello, Baixauli considera lógico que en el seno de ese club nazcan unidades que aproximen a los profesionales del mundo de la empresa al de las marcas y de ahí que el Club de las Primeras Marcas de la Comunidad Valenciana germine dentro de dicho Club. Incluso, –aclara Baixauli–, “las marcas no tienen por qué pertenecer también al Club de Marketing Mediterráneo”.    

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